Francisco Bustillo vinculado al Partido Nacional sería el nuevo canciller

La decisión de Ernesto Talvi de dejar de ser el canciller, generó y continúa, una sucesión de contradicciones a la interna de la coalición multicolor que está muy lejos de cerrarse. Seguramente ni Talvi ni el gobierno al comunicar el hecho a la opinión pública pensaron la complejidad política que se abría.

El solo hecho (no concretado), de que en los países y organismos internacionales, manejan por estos días que en Uruguay renunció el canciller y aún no tiene sustituto, es un grave problema de Estado.

Quizás esto y otros problemas endógenos que están en la preocupación del Presidente Lacalle, llevó a que trascienda en las últimas horas lo que recoge el Semanario Búsqueda; «Tiene que pasar algo increíble para que Pancho no sea el próximo Ministro». Pancho, es Francisco Bustillo, actual embajador en España, que según el semanario; el gobierno se comunicó con él para ofrecerle el cargo de canciller.

La decisión de que el embajador Bustillo sea el próximo Ministro de Relaciones Exteriores, llevó a intensas reuniones en la coalición y en particular con los dirigentes del Partido Colorado en las últimas semanas. Primero, Bustillo es blanco, el cargo dentro del gobierno estaba destinado a un Colorado. Con esta decisión en curso el presidente Lacalle le traslada a Talvi y su gente un problema más con el ex presidente Julio María Sanguinetti. Talvi quiere que el cargo quede en manos de un integrante de su sector, Sanguinetti ya le dio al presidente su consentimiento de que Bustillo sea el nuevo canciller.

Solo frena al Poder Ejecutivo llegar al límite de pedirle a Talvi que concrete su renuncia, porque a nivel parlamentario luego de aprobada la LUC se inicia la discusión de la Ley Presupuestal. En esta instancia determinante para el gobierno, en el legislativo la coalición debería presentarse unida. La discrepancia con Talvi y la de éste con Sanguinetti, pueden generar “más de una dificultad” según la información manejada por varios periodistas cercanos al Ejecutivo.

Para el gobierno es cuestión de semanas o días que el próximo sucesor de Talvi será el actual embajador uruguayo en España Francisco Bustillo. Sanguinetti reclamó la subsecretaría del Ministerio de Relaciones Exteriores para su sector, el Ejecutivo no daría este paso para no profundizar las diferencias con Talvi. Se debe recordar que el canciller renunciante ha manifestado su interés que su sucesor sea de “‎Ciudadanos”, grupo mayoritario dentro del Partido Colorado.

La ex ministra de Turismo Liliam Kechichian y el Embajador Uruguayo en España Francisco Bustillo

El semanario Búsqueda en una entrevista, le preguntó al embajador Bustillo: “¿Por qué se dedicó a la diplomacia? Mi padre era diplomático. Somos cuatro hermanos, los otros tres aborrecieron seguir viajando por el mundo. En mi caso fue vocacional, siempre me encantó. Empecé a hacer la carrera hasta que un día apareció un concurso de oposición y méritos en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Me presenté, ingresé y comencé”.

Francisco Bustillo vinculado al Partido Nacional, durante los pasados gobiernos frenteamplistas de Tabaré Vázquez y José Mujica fue embajador respectivamente en Argentina y España.

Hace menos de un año Bustillo ejerciendo como embajador en España, fue protagonista de una fuerte controversia al permitir que el actual presidente argentino Alberto Fernández, por entonces candidato a la Presidencia, se alojara en la embajada uruguaya en Madrid. La prensa en ese momento consignó que Fernández “incluso, le pidió al diplomático uruguayo que le organizara una zapada con el cantautor montevideano Jorge Drexler. Esto derivó en que; “El prosecretario general del Partido Colorado, Felipe Schipani, consideró «inadmisible» que la residencia del embajador uruguayo, que es considerado territorio nacional, se utilice para alojar al candidato presidencial de otro país. «El Partido Colorado pedirá a la cancillería explicaciones por este hecho» dijo a Infobae.

«Bustillo representa al Uruguay y no corresponde que de alojamiento a un candidato que compite en las elecciones en Argentina. Es como si el país tomara partido por lo que es una elección en una nación vecina. Esto es algo inadecuado e inoportuno. Es la intromisión en los asuntos de otros países» sostuvo Schipani.

Una paradoja de la «nueva normalidad», hoy Francisco Bustillo sería el canciller de Uruguay con el aval del Partido Colorado.

Por José de Lukas

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